En un ejercicio de forofa irracionalidad, impropia de alguien que lleva acudiendo a La Catedral del fútbol la friolera de 25 temporadas, decidí mirar hacia otra parte cuando las televisiones, faraones de los derechos del fútbol, decidieron que la jornada se disputara a las 20:00h de ayer domingo. Esto no sería tan descabellado, de no ser por los 400 Km. de improperios, mala uva y desilusión que precedieron tal decisión…El ambiente, enrarecido a lo largo de toda la semana, presagiaba lo que más tarde se convirtió (a pesar de la ilusión de algunos forofos, entre los que me incluyo…) en un cúmulo de despropósitos sin igual. Los leones saltaron al campo con nulo convencimiento en sus posibilidades, y fueron desarbolados por un equipo colchonero que sin grandes alardes demostró más entereza y calidad que los anfitriones. El Kun Agüero dejó muestras de la calidad que atesora, si bien aún es demasiado pronto para encumbrarle en los altares del fútbol europeo. Las estrellas del fútbol latino, necesitan por lo general un periodo de tiempo para adaptarse al ritmo europeo, y aún es pronto para la estrella colchonera. En cualquier caso, dará alegrías a los suyos.
Por lo demás, destacar el debut goleador de J. Martínez en la máxima categoría (calidad tiene, pero la bisoñez se filtra por cada poro de su piel…), y la pañolada y abucheos constantes de La Catedral hacia el palco, donde un presidente terco, e incapaz en grado sumo, veía impertérrito como la entendida y señorial afición vasca reprobaba su gestión, mientras los leones se comportaban como una “muñeca de trapo” (lamentable narcisismo de la Oreja de Van Gogh…) ante las huestes del vasco Aguirre. La Catedral dictó sentencia. Cúmplase.
Por lo demás, los favoritos van cogiendo posiciones en la zona alta de la tabla. El Barça, demostró una vez más su condición de favorito, y de nuevo con medio equipo rotado, ganó con comodidad en los campos de sport de El Sardinero. El Dream Team culé ganará La Liga sin duda (aguantará el Sevilla de Monchi?), y la velocidad con la que lo haga será inversamente proporcional a lo exigente del bombo europeo.
El Sevilla, en derby apasionante y con buen fútbol, remontó a los chicos de Jabo, que poco a poco se van acomodando a los planteamientos del doctor irundarra. También el Valencia de Quique, tras la aparente paz institucional, parece que despega, y con la excelente dupla atacante (el Moro vuelve por sus fueros…), y con un Vicente recuperado (el Sabio de Hortaleza está de enhorabuena…) parece que recuperará plaza en Champions.
El Madrid del centurión italiano, fiel a su manual, derrochó sudor y músculo para doblegar a una voluntariosa y exenta de calidad Real Sociedad, con buen gol de Reyes. La ausencia de Ronaldo (la soberbia actuación de su ex Cicarelli en la playa le habrá dejado tocado seguro…) y el bucólico deambular de Raúl (ya no tiene cabida en el once, y quien sabe si en la plantilla) se notan, pero si el hereje Rutgerus está acertado, y la rocosa media empieza a generar algo de fútbol con Reyes y/o Guti, los merengues estarán ahí en el tramo final de La Liga.
El resto de equipos, entre los que destacan Depor, Zaragoza, Osasuna y Espanyol, solventaron sus compromisos como locales, mientras que el Levante se adjudicó el duelo de recién ascendidos, venciendo al Decano del fútbol español en su estadio.
La próxima jornada traerá tres partidos interesantes: Barça – Valencia, Betis – Real Madrid, y Atlético – Sevilla.
Veremos…
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